El 18 de octubre de 2020, hubo una protesta muy violenta, en la ciudad de Santiago de Chile culminando con la quema de dos iglesias del centro de Santiago de Chile; cómo si la barbarie se apoderó de la ciudad, ni la estatua de la Virgen María se salvó. El mundo vio las imágenes horrorizado, mientras calla.
En un hecho tan doloroso y desgarrador, qué decir como cristianos.
Solo me vino a la mente el rostro del Padre adolorido y entristecido por el comportamiento de sus hijos, que ha sido perdonado en la cruz, desde el inicio de la historia.
Solo nos queda orar mucho, desagraviar, consolar y pedir perdón, por nuestra conducta, sobre todo la del silencio antes el horror y el atropello que han cometido con nuestro Dios, con nuestra fe, con nuestra Iglesia, un silencio duro. Es urgente que también el mundo se detenga ante la barbarie que se avecina en estos los tiempos, tiempos “de todo me da igual” . Me niego a quedarme callada , me uno a la oración de desagravio, pero también me uno a la indignación de nosotros los católicos, por tamaña barbaridad en nuestro mundo occidental, sin que ninguna autoridad, ni Presidente diga algo.
@Beatriz Martín
19/10/2020
He leído algo sobre ello pero, de todas formas, es algo impensable en el siglo en que estamos, aunque parece ser que la "humanidad" sigue sin ver el mensaje del Amor.
ResponderEliminarUn abrazo Bea.
Fue el domingo me pareció todo muy triste, Rafael, gracias por pasar, un abrazo amigo
EliminarLo vi en las noticias. son tiempos difíciles para vivir
ResponderEliminarUn abrazo amiga
Saludos fraternos
Hola aapayés gracias mas bien por tu solidaridad, el silencio de la noticia me conmueve, osea no pasa nada , si son tiempos difíciles, un abrazo
EliminarGracias por tu visita ha sido un placer verte, yo llevo unos días muy baja de tensión y estoy a medio reposo ,tendremos ocasión otro día de vernos .
ResponderEliminarABRAZOS
Gracias a ti Marina por acercarte primero tu salud, cuidate un abrazo desde mi brillo del mar
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