Dice tu palabra: …
“Mi alma tiene
sed de ti”,
mi corazón se
inclina hacia a ti ,
Padre no me dejes
así,
busco tu consuelo
que me permita vivir.
La cruz diaria en
la serenidad de la fe,
ella siempre sostiene mi vida,
me levanta todos
los días,
en el medio del dolor me llena de alegría.
Es agua bendita el amor de Dios,
calma la sed de
mi alma,
cuando me abrazo
a su palabra.
cierro sus ojos y
espero su gracia.
©Beatriz Martín
30/08/2020
Viene desde el mar de la misericordia de Dios, como bien dice
nuestro Señor Jesús a Sor Faustina.
Esa mirada debemos atenderla, quererla,
buscar siempre su voluntad, orar por las almas, por las devotas y las alejadas por todos y
cada uno de nosotros. En estos tiempos donde los valores religiosos como el
amor, la unidad, la generosidad están deteriorados,
debemos rescatarlos, con nuestro testimonio, con nuestra oración, con llevar la
palabra.
Nos pide que oremos a través de la novena,
por las almas perdidas, por las que están cerca de Dios, por la tibieza, por
los niños.
También consolar a Jesús en esa tristeza
de muerte que Jesús siente en su soledad
como en el huerto de los olivos, agoniza cuando nos observa a veces tibios, a veces dudosos en
el medio de la prueba. Busquemos el mar
de su misericordia.
Les dejo por aquí algunas pinceladas que
le dijo a Sor Faustina.
anta Faustina escribió que Jesús le dijo:
Toda alma que cree y tiene confianza en Mi Misericordia, la obtendrá. ... A las
almas que propagan la devoción a mi Misericordia, las protejo durante toda su
vida, como una madre cariñosa a su hijo recién nacido.
-
No existirá paz sino a través de la Misericordia de Dios
“La humanidad no tendrá paz hasta que se
vuelva con confianza a Mi Misericordia”. (Diario, 300).
-
Cuando el mundo reconozca la Misericordia Dios será señal
de los últimos tiempos
“Que toda la humanidad reconozca Mi
Misericordia insondable. Es una señal para los tiempos finales. Después vendrá
el día de la justicia”. (Diario, 848)
-
“(Que) los grandes pecadores confíen en mi Misericordia.
Tienen derecho ante otros a confiar en el abismo de Mi Misericordia. Hija mía,
escribe acerca de Mi Misericordia hacia las almas atormentadas. Las almas que
hacen un llamado a Mi Misericordia me deleitan. A tales almas les doy aún más
gracias de las que piden. No puedo castigar ni aun al más grande pecador si
hace un llamado a Mi compasión, pero al contrario lo justifico en Mi insondable
e inescrutable Misericordia”. (Diario, 1146)
-
“Quiero conceder un perdón completo a las almas que irán a
la Confesión y recibirán la Santa Comunión en la Fiesta de Mi Misericordia”.
(Diario, 1109).
Buenos amigos lo dejo para la reflexión
busquemos la novena y consolemos a Jesús
y pidamos por todas las almas del mundo entero.
Juntemos nuestras manos para orar con él, a la de esa mirada del cielo llena de amor.
Hasta la próxima.
Beatriz Martín
05/08/2020
